sábado, 3 de octubre de 2015

Retorno de Italia




El guitarrista Eduardo Cervera visita su tierra y muestra lo aprendido en  ese país.  



El músico yucateco Eduardo Cervera Osorio es considerado como uno de los jóvenes guitarristas más destacados del país, debido a sus estudios y calidad a ganado premios nacionales y extranjeros, y desde 2007 realiza giras y participa en conciertos en las salas mexicanas más importantes y en distintos países de Europa.

Como parte de su formación recibió clases de maestros de talla mundial como Oscar Ghiglia, Zoran Dukic, Sefenao Grondona, Enrique Velázquez y Joaquín Clerich.

Desde hace seis años este  artista radica en Italia,  a donde se trasladó para perfeccionarse en la ejecución de la guitarra, instrumento que aprendió a  tocar desde  los 10 años de edad.

En esa nación cursa una maestría en interpretación, en el Conservatorio  “Jacobo Tomadini”, ubicado en la  pequeña y turística ciudad de Udine, ubicada en la frontera con Eslovenia y Austria, y cercana a Suiza y Alemania.

Eduardo aprendió ese instrumento de cuerda de su hermano Juan Carlos, quien también hizo estudios en Europa.

En estos días el músico yucateco se encuentra de visita en su tierra y está ofreciendo varios conciertos para mostrar el desarrollo que ha logrado en el dominio de la guitarra y la interpretación de piezas compuestas para ella. En total programó seis recitales en templos, teatros y centros culturales, parte de ellos son de acceso gratuito. En algunas de esas presentaciones estará acompañado de otros músicos.

Bautizó espectáculos con el nombre de “La guitarra a través de los siglos”. Esto es fruto de su inquietud por difundir la riqueza y el color de las obras escritas para guitarra. El repertorio que eligió para esos conciertos son  un repaso musical con lo más significativo desde el barroco, el clasicismo, romanticismo, el Siglo XX y el contemporáneo.

Cervera Osorio disfruta presentarse ante el público,  para él esas actuaciones son algo mágico, las considera momentos únicos en su vida.

-Cuando estoy en  el escenario olvido todo, solo escucho  y siento la interpretación para tratar de transmitirla a los asistentes –indicó-. Cada artista interprete la música de acuerdo con sus propias vivencias.

Considera que en Hispanoamérica  los intérpretes son más espontáneos en las ejecuciones, lo cual los hace diferente de los europeos que prefieren ser más analíticos.

-En lo personal opino que es bueno seguir reglas mientras te formas en la escuela, pero a la hora de estar en el público hay que dejarse llevar y ser espontáneo.

Las próximas presentaciones de este guitarrista  son el martes 6, a las 8 de la noche, en  el Centro Cultural  Olimpo,  con obras de Paganini, Mario Catelnuovo Tedesco –uno de sus compositores favoritos– y Luigi Boccherini. Compartirá el escenario con el Cuarteto Gustavo Río, integrado por Salvador y Velázquez (violines), Russell Montañez (viola) y Adrián Carrillo (cello).

El viernes 9,  a las 8:30 de la noche, en la Ermita de  Santa Isabel, ofrecerá piezas de Agustín Barrios, Paganini,  Mauricio Ravel, Víctor Celis y Máximo Diego Pujol así como de Roberto Abraham. En este último caso se trata de una transcripción para flauta y guitarra que él interpretará con la flautista Martha Colin, quien también realiza estudios musicales en Europa.


En el último concierto será el domingo 11.  Presentará obras de John Dowland, John Kaspar Mertz, Paganini, Julián Arcas, y otra serie de composiciones de Agustín Barrios, Roberto Abraham y Leo Brouwer. (Mérida Cultura)